En esta etapa el sistema nervioso del bebé está suficientemente desarrollado y empleará este tiempo para perfeccionar y madurar sus órganos y funciones corporales, como por ejemplo sus pulmones. Si naciera prematuro, ya podría respirar, pero con dificultad. El esqueleto se endurece, menos el cráneo, que permanece suave, lo cual permitirá que pase por el canal vaginal a la hora del nacimiento. Es capaz de chuparse el dedo y puede que tenga hipo. A pesar de que tiene menos espacio en el útero porque ha crecido, durante este mes la mamá notará mucho más sus movimientos. Ya cuenta con sentidos que responden a los estímulos. A nivel del gusto es capaz de distinguir entre el sabor dulce y el amargo. Respecto a lo auditivo es capaz de memorizar los sonidos familiares y reconocer no solo la voz de la madre, sino también la del padre en caso de que le hable de manera regular. A nivel visual ya abre los ojos porque tiene sus párpados formados. Puede darse cuenta y reaccionar a los cambios de luz que se producen a través de la barriga. Es importante saber que, aunque el bebé realice movimientos, pasa mucho tiempo dormido. Por ello es importante no sobre estimularlo ya que podemos perturbar su sueño y tranquilidad.

Su piel es más gruesa ya que la grasa necesaria la va llenando y eso le permitirá regular mejor la temperatura. Seguirá abriendo y cerrando los ojos, pero seguirá durmiendo casi todo el tiempo. Tiene cada vez menos espacio para moverse y estirarse, por lo que la mamá notará más sus movimientos.

En el último mes de embarazo los órganos del bebé terminarán de madurar completamente, lo que le permitirá estar listo para el nacimiento. Aumentará de peso hasta los 3,000 gr o más hacia el final de la gestación y se alarga hasta aproximadamente 50 cm. Ya tiene cabello en la cabeza, sus uñas crecen y sus sentidos están plenamente desarrollados. La placenta, que se encarga de nutrir y oxigenar al bebé, pesa hasta 500 gr. En el momento del nacimiento se desprenderá del útero. El bebé empezará a respirar por su propia cuenta y el cordón umbilical dejará de ser el conector entre el cuerpo de la madre y del bebé. Algo similar ocurrirá con la alimentación: apenas lo coloquen sobre el cuerpo de la madre, el bebé será capaz de reptar y buscar el pecho instintivamente para lactar inmediatamente.