Si eres madre, aplica estas 5 recomendaciones para el autocuidado de tu salud emocional

La Sra. Paola acaba de tener su segundo hijo, y está feliz tratando de hacer posible que su bebé reciba todo el cariño y cuidado que ha previsto; sin embargo, los dias pasan y entre los cuidados del bebé, llevar a su primer hijo al colegio, asi como atenderlo, hacer que todo funcione bien en casa y pensar que pronto deberá retornar al trabajo; hace que se sienta intranquila. Ella no lo nota, pero de un tiempo a esta parte duerme menos, se siente muy cansada y casi no quiere conversar con nadie.  

Este parece ser el drama de muchas mujeres, que estan tratando de ser una “buena mamá”, lo cual no significa dejar de lado nuestras emociones y necesidades, sino encontrar el equilibrio entre la crianza de nuestro niño y el cuidado que necesitamos para sentirnos bien. 

Porque una mamá que busca ayuda cuando se da cuenta que no puede hacerle frente a alguna situación, descansa, mantiene relaciones cercanas con amigos o familiares, entre otros; tiene mejores herramientas para ser la mejor madre posible.

Isis Baldassari, psicóloga  y promotora del Programa de Salud Mental (SAME) de la Fundación Baltazar y Nicolás, menciona que las madres atraviesan constantemente situaciones de estrés por la labor diaria que realizan en la crianza de sus hijos; por ello, si no organizan y distribuyen las labores de la casa, se dan un tiempo de respiro para ellas mismas, entre otros, puede tener dificultades para hacer frente a los cuidados y establecer el vínculo afectivo y positivo con sus pequeños.

En este sentido, Baldassari comparte 5 recomendaciones para ayudar a un mejor autocuidado:

1. Piensa un momento en ti todos los días

Piensa en lo que puedes hacer por tí, incluso cuando sólo cuentes con 10 o 15 minutos por la mañana y por la noche; darte este tiempo puede lograr la diferencia en tu capacidad para hacerle frente a tus responsabilidades. Recuerda que debes mantenerte fuerte y saludable, haz un poco de ejercicio y toma un baño de agua caliente para relajarte.

2. Un tiempo a solas y un tiempo juntos

Los padres necesitan de vez en cuando recargar energía física y emocional para ser soporte en la crianza de sus hijos. Para esto, es importante contar con el apoyo de la pareja, para que cada uno pueda gozar de tiempo a solas y de tiempo juntos. Es importante compartir momentos y emociones sobre lo que están sintiendo, así reconocerán el esfuerzo que realizan y se darán la mano para apoyarse.  

3. Alimenta tu espíritu, alimenta tu mente un tiempo juntos

Encuentra un espacio para tu tranquilidad y reflexión, reconoce los espacios en el que te sientas bien y puedas darte un tiempo para hacer actividades como meditar, pintar, ver una película o leer un libro. Esto te ayudará a despejar tu mente y recargar energía para encontrar ese espacio contigo misma. 

4. Distribuye tus tareas

Desde los primeros años es posible que todos se involucren porque además con este tipo de responsabilidad se transmiten valores como el respeto y la disciplina, entre otros. La participación del hombre en la crianza permite ser corresponsable de la crianza, compartiendo con la mamá las tareas domésticas y cuidados, tales como: alimentar, vestir, pasear, hacer dormir, jugar, bañar y enseñar a tu hijo o hija.

5. ¡Respira profundo!

Cuando cuidas de tus necesidades físicas, emocionales e intelectuales, te estás ayudando a ser una mejor madre. Ten como prioridad diaria el tener tiempo para ti ¡lo vale! Te sentirás mejor y tu relación con tu niño y los demás miembros de la familia mejorará también. 

Recuerda, para cuidar de otros, primero #CuidaDeTi.